lunes, 14 de septiembre de 2020

Calarcá Tunelado

Sí, ya lo sé, el Túnel de la Línea es una realidad.  Septiembre del 2020 y ya ruedan bajo la montaña, cordillera que decimos los colombianos, vehículos de todos los pelambres rumbo al centro del país, además de la grande y numerosa familia "miranda", que engrosa y multiplica el tránsito vehicular por estas calendas en la falduda y atosigada carretera.  Como bien saben vivo un poco lejos del terruño para haber participado de la romería. Las que se pierde un ciego por no ver.
Pero gracias a las facilidades comunicativas que se nos ofrece hoy, he podio enterarme de algunas cosas relacionadas con tan esperada y demorada obra.  No es menester entrar a reproducirlas, que para eso están Álvaro Ortiz y sus colegas, y me cuido del intrusismo profesional y de meter la pata. El Túnel ya se transita, las demás obras siguen su curso, los acontecimientos los narra y comenta el citado bachiller robledista, y yo desde la distancia procuro seguir respirando en el covidcioso mundo que nos tocó vivir este bisiesto 2020.

Y a todas estas, ¿Qué diablos tiene que ver el túnel y la covid con los olvidados bachilleres del Colegio Robledo de Calarcá, si en 1978 las gripes o gripas no mataban tanto y de la perforación de la cordillera no se decía nada?  A alguno de los susodichos los habrá visitados el chicho ese y otros tantos se pasearán por el tubo que atraviesa la Central, no me cabe la menor duda.


NOTA: Me pasé por este rincón después de varios meses de ausencia y encontré que en algunas entradas hay comentarios recientes, es decir, del año en curso; lo que me hizo ver que los visitantes siguen apareciendo de cuando en cuando; a este viejo rincón no se le han apagado la luces del todo y por ello quise dejar esta entrada como testimonio.  

Un abrazo para los sexagenarios bachilleres que a mas de cuarenta años de haber abandonado la colina y sus galpones, siguen dándole a la vida motivos para vivirla. 


 

viernes, 26 de octubre de 2018

Bitacora ausente.

Entre el 1º de febrero del 2008 y el 22 de octubre del 2016, realizamos 166 entradas o escritos en este instrumento virtual denominado Blog. Por lo que se puede ver el esfuerzo no fue mucho, poco mas de una por mes, pero sin llegar a las dos, que eso ya es demasiado y no estábamos para agotarnos; mejor dicho, y recurriendo a una palabreja que por esas calendas se escuchaba, un auténtico cadapuedario.

Así las cosas y pensando en la posibilidad de un reencuentro "mas que fuera" virtual, de los bachilleres del Colegio Robledo de Calarcá de 1978, todo  parece indicar que no pasamos de las intenciones, pero bueno, se persistió por mas de ocho años, varios de los citados dieron señales de vida y es muy probable que algunos se dejaran caer por estor bites, pero sin dejar rastro.

Hoy, después de mucho tiempo sin visitar este , ahora sí, olvidado rincón del llamado ciberespacio, encontré un dato que me llevó a realizar esta nueva entrada; hoy mismo, casualmente se visitaron 100 páginas del blog, y en el último mes, mas de 450, repartidos en cuatro días. Entonces uno se pregunta ¿quiénes, y qué encontraron, serían calarqueños perdidos en el mundanal ruido, acaso robledistas, y alguno bachiller de ese glorioso mil novecientos setenta y ocho? imposible dar respuestas.

De todas maneras, deja cierto sabor de boca eso de ver que a pesar del paso del tiempo y del olvido por parte de los escribiente, este espacio sigue teniendo visitantes, y, por lo que reflejan las estadísticas del último mes, se detienen en él; pero en silencio, pasan en puntas de pies, cual gato en entejado.  Que bueno sería que dejaran alguna huella.

Un abrazo a todos, es posible que ahora que estamos llegando a la cuarentena volvamos a darle cuerda a asunto.

sábado, 22 de octubre de 2016

Dancizo Yarnes

Con ese nombre podría omitir los apellidos sin riesgo de confusión.  Toro Baquero...

Ahora bien, que porqué vengo ahora con el nombre de este personaje, fácil, porque revisando el blogg, después de muchos meses de abandono, encontré un comentario suyo.  Sí, un cometario en el blogg donde brillan por su ausencia y tuvieron que pasar casi seis meses para leerlo - el comentario es del 29 de abril- así somos, nos quejamos por el silencio y hacemos oídos sordos a los gritos.

Así que después de teinta y no sé cuantos años, el tío se deja sentir, y dice recuerdar con nostalgia "su colegio",  como tanto otros que nos sentimos aún parte de la colina convertida en centro de enseñanza a finales de la década de los sesenta en la Calarcá de entoces.

Me dice que vive en Ecuador, sin más datos, así que poco mas podría decir, a parte de la ubicación un poco a sur.  Ahora bien, buscando en este chisme llamada internet, y al introducir su nombre encontré un homónimo que sólo se diferencia por el segundo apellido, así que blanco, gallina lo pone, huevo se llama y frito se come, tal parece que´l Dancizo este hijo tiene...

Y hasta acá, el chisme, paremos el cotilleo que no es bueno introducirnos en la vida privada de las personas, por muy cercanas que hayan sido, no hay que abusar.

Lo que son las cosas, cuando este moribundo, casi desahuciado rincón perdido en medio de la nada, estaba condenado al olvido, viene uno de los citados en su primera entrada y lo despierta.

Un nuevo abrazo para los improbables lectores, ya sabrán de nosotros...

viernes, 22 de enero de 2016

Y otro mas

Sí otro semestre y así todo un año, un 2015 que se borró de la lista...

Pero las cosas pueden cambiar, así como cambia el calendario, cambiamos también los que pasamos sus hojas, que es un decir eso de pasarlas, la verdad es que las arrancamos, y de raíz.  Cada día pasado, cada semana, mes, año se convierten en componente de lo que terminamos siendo; al fin y al cabo somos resultado de nuestras vivencias y nadie vive por otro, puede que en ellos nos reflejemos, pero poco mas, cada cual carga sus culpas y a nadie se le quita lo bailao!

Robledistas semos y que se caiga el mundo, esa herencia no nos la roban, pero tampoco podemos desprendernos de ella, es huella tallada en piedra, que no en arena, y nos marca e identifica; para bien o para mal, hijos de la colina arenosa donde aprendimos a ser y fuimos... Calarqueños para mas veras, hasta lo no nacidos en el terruño.

No faltará quien se pregunte, y a este que bicho raro lo pico?  nada, ni bicho ni picadura, simplemente que hoy me dio por volver a caminar por este entuerto mal llamado blogg, y pues los dedos que no se detienen, entre tanto La transformación del mundo espera sobre la mesa  (y no es que el mundo se detenga mientras las palabras se turnan una tras otra para formar la entrada, faltaría más, la susodicha transformación es un libraco en que ando entretenido de un tal Jürgen Osterhammel).

Así las cosas, confío y espero, lo siento por los invitados, que durante este 2016 nos volvamos a dejar caer por este rincón para recordar, que también en vivir, como dicen los que saben.

Un abrazo grande para los que en 1978 se hicieron bachilleres en el Colegio Robledo de Calarcá, Quindío, Colombia y hoy deambulan por las perdidas calles de cualquier rincón del mundo.

sábado, 6 de junio de 2015

Un semestre congelado.

Estando a punto de desaparecer, de dejar de ser, de pasar a formar parte del imperfecto pasado que todo lo consume, se viene don PTT con eso del "Cuento Contigo", y, claro, surge la excusa, o mejor la justificación, tal vez la obligación, de retomar la tarea.  Cómo pasar por alto tan comprometedor "cuento", que te atiza y te inflama como fuelle en hoguera, o te somete, que es otra forma de verlo, que no de leerlo; aún no dispongo de ejemplar!.
Cuento Contigo, vaya, que te agarra por el cuello y no te suelta, o te lo deja suspendido en la oreja, sin más, y te quedas como flotando en el impuro espacio que separa la culpa del compromiso. Culpa de saber que "conmigo no cuentes, tío", que yo para esas andanzas no me apunto, que no me importa ni me conviene; o compromiso de saberse agarrado por el cogote sin escapatoria inculpable.  Y el cuento se convierte en algo más, que no te deja tranquilo, bien porque lo esquives o te dejes arrastrar; ya está ahí metido en el entrecejo, sin cómo espantarlo; vaya amigos que dice uno tener!
Así que el tío ese, después de doctorarse pos-doctorarse y demás entuertos académicos, nos viene y nos amarra con el famoso y desgastado "cuento contigo" no me falles, que para ello te tengo... te tengo agarrado por donde ya sabemos y no hay forma de que te sueltes.
De qué va la cosa, aún no lo sé, los diez mil kilómetros de distancia me salvan aún, a pesar de los múltiples correos recibidos con referencias y comentarios de toda índole y variado pelambre, no dispongo de artefacto, que cual sentencia judicial me comprometa; así que de momento, los mejores deseos para mi gran amigo, Villegas Uribe apellidado, Carlos Alberto bautizado y PTT apodado, por sus aportes a las letras quindianas.  Que siga así, que va por buen camino; pero que nos deje tranquilos, que nosotros no tenemos mas culpa que habérnoslo encontrado en el camino...
PD:  Para desentendidos, el susodicho ahora forma parte de los que hacen posible la Biblioteca de Autores Quindianos, ¡Enhorabuena!

viernes, 12 de diciembre de 2014

12 - 12 - 2014

De nuevo doce de diciembre, y treinta y seis años después seguimos avanzando, cada cual por su rumbo y a su ritmo; algunos ya habrán llegado mientras otros tratamos de encausarnos para evitar el arrastre o el precipitamiento.  Los mas, que serán la mayoría, impertérritos, avanzan cumpliendo con el sino, que si-no, trágico, con el propio y con los que a bien hallan tenido echarse encima.  Y cada oveja con su pareja (que no ovejo - carnero, para evitar confusiones y no tener que ponernos a desfacer entuertos, que eso es cosa de quijotes, y Cervantes lleva medio milenio mas perdido que embolatado).
 
De aquellos mozalbetes poco queda.  Ahora, reflejo del espejo, me hago consciente de la triplicación del tiempo transcurrido... y mejor no detenernos mucho en el asunto... espejito, espejito...
 
Han pasado seis, que casi siete, años desde la primera entrada a este entuerto denominado blogggggg, y sigue ahí, mas embolatado que en remolino un corcho, dando vueltas cual peonza - trompo, o tiovivo -noria, pero sigue, que aún no pierde el pulso, así a veces no se le perciba, a lo mejor dando los últimos estertores, o tal vez no; solo el tiempo lo dirá; entre tanto, que la vida siga y nosotros con ella.  Que la cita la tenemos pendiente y cual promesa, eterna, mientras nos e cumpla.
 
PD:  PTT y otros cuentos, sus cuentos, cuentts.  Lanzamiento de libro (¿cómo los lanzarán? y ¿desde dónde?) lanzado está; el libro de nuestro estimado y querido contertulio, ahora haciendo parte de la Biblioteca de Autores Quindianos.  Y hasta le tratan de "maestro", nada mas ver la nota publicada en el Boletín de prensa de la Gobernación de Quindío, del 9 de los corrientes,  me enteré del trato y hasta le dieron placa, si placa, que plata no lo sé... que jodido es el Carlitos este.
 
RPD:  Año con viaje y reencuentros, me topé a bocajarro en Calarcá con Álvaro Ortiz y con Fernando Laverde, encuentros callejeros, que el tiempo no daba para más, y visité a Pacho Duque, robándole minutos del trabajo para al menos saludarnos; se me quedó pendiente Fernando Londoño, será en una próxima y si los malabares de la vida lo permiten volveré con mas tiempo y que al azar decida.
 
Un abrazo de nuevo para todos y que la vida continúe...

sábado, 29 de noviembre de 2014

Lecturas alquiladas - Historietas al alcance de la mano.

 
Eran los años 70´s y en Calarcá se podían alquilar revistas, por unas cuantas monedas teníamos acceso a las aventuras de los mas variados personajes, de todas la pintas, colores y  valores  (Kalimán, Arandú, Tarzan, Águila Solitaria, El Santo, Supermán, Fantomas, Mandrake, Juan Sin Miedo, El Valiente, Archie, Popeye, Garfield, Menín, Hermelinda Linda, Condorito y la pléyade de personajes de Disney que tenían sus propias ediciones).  Eran una continuación de los que dominicalmente encontrábamos en las prensa escrita, los diarios o periódico que llamábamos - Pomponio, Don Abundio, Olafo, Ferdnand, Educando a papá, Dick Tracy, Lorenzo y Pepita, Capetín, Carlitos- .
 
Pero la disponibilidad de los prensa los domingos no estaba generalizada y la cita con las aventuras, en formato gráfico, la teníamos en ese local de la carrera 24, antes de llegar a la 39, hoy perdido dentro de la construcción  que ocupa el costado sur-este de la Plaza de Bolívar, diagonal de la iglesia, para más señas, edificación  reconstruida para sede del BCH y hoy sede de la administración municipal; en La Magnus, atendida por don Pedro Pachón y familia que, una vez transformada en papelería se ubicó en el local contiguo, esquina de las mencionadas vías, y dio paso a La Derlin, que continuó con la labor, regentada esta vez por doña Mercedes, cuñada de don Pedro, que todo queda en familia, eh! Vaya chisme!.
 
Así que la familia Pachón era la que nos suministraba el sano y económico, además de educativo entretenimiento, de manera insospechada estaban contribuyendo con las formación de futuros lectores, pero ese es tema para entendidos en la materia, así que ahí le queda al doctor PTT (cuasi-semi-ólogo).
 
Eran los tiempos cuando la televisión aún no había cumplido el alienante proceso de masificación, en muchas de nuestras casas aún no disponíamos de un aparatejo de esos y las historietas era una de los formas de abstraernos un poco de la rutina.  Tiempos donde aún podíamos jugar en la cuadra, sin muchos miramientos, la guerra libertadora, al escondite, al trompo y cosas, mas antes de que iniciáramos nuestras aventuras al Santodomingo, lo Chorros, el cerro del Castillo, al rio Quindío... Sin olvidar que era la radio era la mandaba, nuestras madres con sus radionovelas y para nosotros las aventuras de Kaliman o Arandú, al caer la tarde, a la hora del fríjoles!
 
Turok, las aventuras de Turok, el guerrero de piedra, eran uno de los motivos de mis escapadas al mundo de la fantasía gráfica, seguro estoy que no era de las mas populares y conocidas, pero me recuerdo siguiendo mes a mes sus aventuras en compañía de Andar, su inseparable amigo.
 
Historietas, aventuras, revistas, ahora comics, tebeos en España, pero son la misa cosa o al menos muy parecida, algunos hasta han logrado el movimiento con la tv, el cine y los vídeos; pero las historietas en papel seguirán ahí como testimonio de una época que se pierde en el tiempo, cuando parte de la diversión la teníamos sentados en unos mullidos bancos de madera, en la Magnus o la Derlin, con una revista entre las manos, perdidos en otros mundos imposibles, de la mano de esos personajes, que gracias al ingenio de unos desconocidos, nos permitieron soñar, escapar, buscar...
 
Nota.  A propósito de los autores, nunca me preocupaban ni llamaban mi atención, no eran mas que un dato perdido en la carátula, si es que la había, o una anotación al margen; con excepciones, claro está como no recordar a Edgar Rice Burroughs.
 
Imagen tomada de blogdesuperheroes.es